El confinamiento a causa de la pandemia desatada por el COVID-19 puede ser una buena oportunidad para mejorar e incrementar el cuidado de nuestra piel, especialmente en el caso de las personas con psoriasis. La primera cuestión que debemos tener muy en cuenta es el correcto lavado de manos. Con este sencillo gesto reduciremos el riesgo de infección y también ayudaremos a evitar la transmisión del coronavirus.

No se trata de un simple lavado de manos, sino que debemos dedicarle el tiempo y la atención suficientes para evitar que queden zonas contaminadas. En internet hay múltiples gráficos o vídeos demostrativos. No obstante, si tienes psoriasis intenta (en la medida de lo posible) no abusar del uso repetido de jabones, detergentes y gel hidroalcohólico para que tus manos no se resientan.

Aparte del lavado de las manos, también es necesario limpiar y desinfectar todos los objetos procedentes del exterior que puedan estar contaminados: ropa, bolsas de la compra, artículos del supermercado, etc. Ten presente que el coronavirus tiene la capacidad de resistir muchas horas, e incluso días, sobre las superficies, por ello es tan importante frenar los contagios por medio de la limpieza y la desinfección.

Especial cuidado de las manos

Estas medidas pueden tener su parte negativa en la piel de una persona con psoriasis, dado que el lavado de manos frecuente con jabón, el empleo de sustancias desinfectantes como la lejía o el uso de los guantes nos obliga a tener un cuidado especial de las manos para evitar la irritación de la piel. Es recomendable emplear productos de limpieza que contengan ingredientes hidratantes.

Si es posible, se recomiendan cremas o emolientes para hidratar la piel que contengan ácido hialurónico, ceramidas, vitamina E u otros ingredientes reparadores, especialmente si tienes psoriasis palmo-plantar. Un buen truco es ponerse guantes de algodón debajo de los guantes de látex. En caso de que aparezcan erupciones cutáneas sostenidas o síntomas inflamatorios en las manos, deberías consultar con el dermatólogo.

Mantener el tratamiento habitual

En cuanto al tratamiento para la psoriasis, los especialistas insisten en intentar seguir las pautas habituales. El Grupo de Psoriasis de la Academia Española de Dermatología y Venereología (AEDV) ha lanzado un mensaje de tranquilidad a los pacientes con psoriasis. No obstante, si eres de los que reciben un tratamiento inmunosupresor o un tratamiento biológico es importante que hables con tu dermatólogo. En cualquier caso, hasta que esto ocurra, la principal recomendación es seguir con el tratamiento establecido.

La gran mayoría de pacientes con psoriasis que se trata con medicación tópica y/o emolientes debe seguir también con su tratamiento habitual y extremar los hábitos de higiene e hidratación que acostumbren, aunque ya sabemos que no hay dos pacientes con psoriasis iguales, ni dos tratamientos iguales, como nos recuerdan en Dermapixel. Por ello, lo ideal sería analizar cada caso de forma individualizada.

Tal vez la dispensación en la zona hospitalaria de los tratamientos se haya cancelado por la situación de confinamiento que vivimos y por la reorganización de los propios hospitales, en estos casos ponte en contacto con la farmacia hospitalaria y te indicarán cómo y dónde puedes recogerlo. En algunas Comunidades Autónomas se pueden recoger en las oficinas de farmacia que están a pie de calle. Debemos mantenernos siempre informados e intentar adaptarnos lo máximo posible a las circunstancias.

Reducir el riesgo de contagio

Por otro lado, los médicos recomiendan extremar las medidas y seguir una serie de acciones preventivas diarias para ayudar a prevenir la propagación del coronavirus (COVID-19). Te recordamos las principales, tal como recoge el Instituto para la Mejora de la Asistencia Sanitaria (IMAS Fundación):

1. Quedarse en casa mientras dure el estado de alerta o salir solo si es imprescindible. En caso de estar contagiado, es necesario guardar reposo en aislamiento.

2. Evitar el contacto cercano con personas enfermas.

3. Intentar no tocarse los ojos, la boca y la nariz.

4. Utilizar pañuelos desechables para toser o estornudar y tirarlos inmediatamente después.

5. Limpiar y desinfectar las superficies y los objetos más usados en el hogar.

6. Guardar las distancias de seguridad con otras personas. Unos consejos que todos podemos seguir, independientemente de la patología que tengamos. ¡Ánimo!