El 25% de las bajas en el trabajo las provocan las enfermedades reumáticas, enfermedades que son responsables hasta de la mitad de los casos de incapacidad laboral permanente, aunque el diagnóstico precoz, un buen tratamiento y una atención adecuada podrían evitar esa situación.
Determinados puestos de trabajo donde el esfuerzo físico es grande o se utilizan determinadas articulaciones de forma repetitiva pueden agravar o causar lesiones. Si este es tu caso, infórmate sobre tus derechos y las opciones que tienes para adaptar su puesto de trabajo de forma que puedas mantener tu actividad laboral con normalidad. En los casos en que el diagnóstico no haya sido lo suficientemente precoz como para evitar lesiones en las articulaciones, puede que necesites solicitar una discapacidad o incapacidad (temporal o permanente).