En algunos casos, se requiere la extirpación de la glándula del timo para reducir la debilidad muscular y la necesidad de tomar medicamentos como los inmunosupresores. Como el procedimiento reequilibra eficazmente el sistema inmunitario, la timectomía puede mejorar la enfermedad y disminuir la dosis y tiempo de la inmunoterapia en la miastenia gravis. El objetivo de la timectomía es eliminar el origen de la producción anómala de anticuerpos.
Los beneficios de la cirugía no son inmediatos y la mayoría de los pacientes tardan tiempo en responder al tratamiento. Tras la intervención, los pacientes continúan tomando la medicación prescrita con el objetivo de ir reduciéndola con el tiempo. La respuesta a la cirugía dependerá de la edad de la persona, de su respuesta al tratamiento médico previo y de la gravedad y duración de la MG. Existen tres técnicas diferentes de timectomía. Su neurólogo y su cirujano le aconsejarán si la cirugía es una opción idónea en su caso y, en caso afirmativo, qué tipo es el más adecuado.
Los tres tipos posibles de timectomía son la transesternal, la transcervical y la cirugía torácica video-asistida (VATS). El objetivo de todas estas técnicas es extirpar la totalidad de la glándula del timo, independientemente de cómo se realice el procedimiento.