Entre los hábitos higiénicos imprescindibles para las personas con epilepsia destacan:
💤 Mantener una buena higiene de sueño
Un sueño reparador en calidad y en cantidad (entre 7 y 9 horas) es fundamental para la buena salud y calidad de vida de cualquier persona. En las personas con epilepsia, las alteraciones en el sueño pueden ser causa de crisis epilépticas.
Además, el 70% de los pacientes tienen somnolencia diurna y un 40% insomnio nocturno, de ahí que mantener una buena higiene del sueño redundará en un mejor control de la epilepsia. En los niños, es frecuente detectar crisis epilépticas nocturnas, de ahí que se deba extremar la higiene del sueño.
🍷 No consumir alcohol
Según la OMS, la prevención de la epilepsia asociada a accidentes cerebrovasculares se centra en varios factores de riesgo prevenibles, como es el consumo excesivo de alcohol.
Por un lado, si un día se bebe alcohol eso no significa que no se tome la medicación, sino controlar lo que se bebe y evitar siempre los excesos. Un consumo excesivo de alcohol y la abstinencia de alcohol pueden incluso conducir a un estado epiléptico, es decir, un problema que amenaza la vida de la persona.
De igual modo, las bebidas alcohólicas ayudan a la excitación de las neuronas, lo que hace que sea más fácil sufrir convulsiones. Además, este factor va relacionado con la alteración del patrón del sueño.
Por otro lado, los medicamentos para las convulsiones también pueden reducir la tolerancia al alcohol, por lo que los efectos inmediatos del consumo de bebidas alcohólicas son mayores.
De esta forma, es de suma importancia que el paciente consulte con su médico acerca del alcohol y seguridad.
📱Controlar la luminosidad de las pantallas
En el mundo actual es difícil estar alejados de las pantallas digitales. Pero si se padece epilepsia se debe tener una exposición mínima y controlada, en especial en el caso de los adolescentes que pueden sufrir epilepsia fotosensible.
Cuando se utilicen, se deben ver en ambientes bien iluminados, a una distancia adecuada (unos 3 metros la televisión y 1 metro para pantallas de ordenador), evitarlas en estados de cansancio o somnolencia, y nunca más de 40 minutos seguidos. En el mismo sentido, se deben evitar los destellos de luces de las discotecas.