La dieta cetogénica debe ser indicada por un médico junto con un dietista o nutricionista. Los niños que están a dieta deben tener un seguimiento cercano por parte del equipo médico/nutricionista para que sigan la dieta y obtengan los nutrientes necesarios. Por norma general, el comienzo de esta pauta alimentaria se realizará en régimen de hospitalización, ya que permite una mejor detección y tratamiento de las posibles complicaciones agudas y un aprendizaje adecuado y gradual de los padres. Los bebés que deben hacer una dieta cetogénica reciben una fórmula médica especial. Los niños que reciben nutrición a través de una sonda también pueden usar una fórmula médica. Los niños de 1 a 3 años y los de mayor edad pueden hacer la dieta cetogénica comiendo alimentos hechos con recetas especiales.
A pesar de que la dieta cetogénica se lleva utilizando desde el año 1970 para tratar la epilepsia, los médicos no están seguros de cómo funciona el hecho de tener una mayor concentración de cetonas en sangre. Algunos tipos de crisis epilépticas parecen responder mejor que otras a este tipo de alimentación.
Los bebés que deben hacer una dieta cetogénica reciben una fórmula médica especial. Los niños que reciben nutrición a través de una sonda también pueden usar una fórmula médica. Los niños de 1 a 3 años y los de mayor edad pueden hacer la dieta cetogénica comiendo alimentos hechos con recetas especiales.
En unos pocos meses sabrá si la dieta cetogénica funciona bien con su hijo. Si la dieta da resultado, es posible que el médico le recomiende retirarle la dieta a su hijo cuando lleve dos años controlándole las crisis. El proceso de retirada se hace a lo largo de varios meses para evitar que se desencadenen crisis epilépticas.
Hay personas que mantienen una dieta cetogénica durante años.
Esta dieta tiene potenciales efectos secundarios pero el riesgo de que sean graves es bajo. Los efectos secundarios más frecuentes son estreñimiento, vómitos, dolor abdominal, falta de energía, hambre, deshidratación, aumento del colesterol en sangre (hipercolesterolemia), déficits de minerales, formación de cálculos renales, acidosis metabólica y alteración del crecimiento. La rigidez de esta dieta y las dificultades para seguirla pueden suponer una alteración importante en el estilo de vida del paciente que condicione su seguimiento.
Los efectos de la dieta cetogénica no son rápidos ni fáciles de obtener y puede ser difícil mantener una dieta tan estricta.